Visitamos dos pueblos cercanos a Tortosa, conectados con Miró y Picasso. El primero vivió parte de su infancia y sus veranos en Mont-roig del Camp; el segundo pasó temporadas en Horta de Sant Joan.
MONT-ROIG DEL CAMP Y JOAN MIRÓ
La familia de Joan Miró era de Mont-roig, y tenían tierras y un «mas» alejado del pueblo, cerca de la carretera general y de la costa. Miró pasó parte de su infancia allí y volvió con frecuencia. Sus primeras pinturas, entre el fauvismo y el surrealismo, recogen imágenes del pueblo, los campos y playa y el mas.
El pueblo de Mont-roig, situado en el interior, está flanqueado por montañas. Es el típico pueblo de montaña mediterránea, apretado alrededor de la colina. En medio de sus calles estrechas, a la entrada del pueblo, la Església de Sant Miquel, gótica pero con una portalada renacentista.
Joan Miró varios cuadros de Mont-roig y alrededores, durante sus estancias aquí. Una de sus visiones es el cuadro «Mont-roig, la iglesia y el pueblo» (1919). Recoge la vista del pueblo desde la carretera; destaca la iglesia y casas apretadas que dejan entrever calles longitudinales.
El Mas Miró
Mont-roig tiene un amplio término municipal, que va desde las montañas y el pueblo hasta el mar y las playas. Cerca del mar, está el «Mas» de la familia de Joan Miró, perfectamente restaurado como museo y cuidado.
Desde el camino de entrada, se ve el taller del pintor. Tras el taller, encontramos el «Mas» y, a continuación, la casa de los «masovers».
Miró pintó estos parajes, en varias obras, a partir de finales de la década de 1910 y en los años 20. Quizá la pintura más famosa de este período sea «La Masía» de 1919.
Miró pintó también los campos de alrededor de la masía y la playa cercana.
HORTA DE SANT JOAN Y PABLO R. PICASSO
Pablo R. Picasso no tenía ninguna relación familiar con Horta de Sant Joan. Sin embargo, pasó allí dos temporadas. Primero, invitado por su amigo Manuel Pallarès para reponerse de una enfermedad. Después, en el verano de 1909, con Fernande Olivier.
Cuenta la leyenda que Picasso «se convirtió» al cubismo, viendo las construcciones y la situación geográfica «cubistas» de Horta de St. Joan.
Horta de Sant Joan
Horta, como Mont-roig, se encarama alrededor de una montaña, presidida por la iglesia. Desde allí, las caprichosas formas de las montañas que la rodean despiertan una sensación especial. El núcleo antiguo es un sinuoso conjunto de calles medievales.
En su centro, la Plaza Mayor, porticada, abriga el Ajuntament, renacentista, y la iglesia.
A cierta distancia del pueblo, está la montaña de Santa Bàrbara, que Picasso retrató en varias de sus obras. Fue uno de los primeros lugares que el pintor visitó con su amigo Pallarès, en la primera estancia del artista.