Mondoñedo

ASTURIAS Y GALICIA, EN AGOSTO 2023 (5) LA MARIÑA DE LUGO: MONDOÑEDO Y VIVEIRO

Agosto 2023. Seguimos por la Costa de la Mariña Lucense o Mariña de Lugo. Una excursión por el interior, a Mondoñedo, y el viaje a Viveiro, capital de la comarca. Pequeños pueblos campesinos, playas, turismo.

MONDOÑEDO. LA GALICIA INTERIOR, RURAL Y BARROCA

Desde Foz, hacemos una excursión por el rural interior de la Provincia de Lugo, campesino y ganadero. 

MONDOÑEDO

Mondoñedo, en medio de un valle verde y cultivado, muestra de lejos sus casas blancas con tejado de pizarra. Histórica ciudad episcopal, conserva toda su riqueza arquitectónica. La catedral gótica y barroca, las casas urbanas señoriales con galerías y escudos nobiliarios. 

La Catedral de Mondoñedo, gótica con añadidos barrocos, domina el centro de la ciudad histórica. La fachada, encuadrada por dos torres barrocas del S XVIII, guarda sus tres grandes arcadas, el rosetón y su portada góticos del S XIII. El sobrio interior es románico gótico.

La Plaza de la Catedral está rodeada de palacios barrocos y edificios de viviendas burgueses del S XIX. Sus arcadas y solanas les dan un encanto especial.

Las calles y plazas de la ciudad antigua están bordeadas de casas blancas, adornadas con blasones o balcones de hierro forjado y galerías.

Monasterio de Lourenzá

De vuelta hacia Foz, entre montañas, se descubre el pueblo de Vilanova de Lourenza y su Monasterio de San Salvador, de origen gótico, pero barroco actualmente. Su impresionante fachada barroca sirvió a Fernando Casas de ensayo, para su posterior fachada de la Catedral de Santiago.

HACIA VIVEIRO. SAN MARTIÑO DE MONDOÑEDO

Salimos de Foz hacia Viveiro, por la costa de la Mariña de Lugo. Hacemos un desvío al interior, para ver San Martiño de Mondoñedo. Aquí estuvo el obispado, hasta ser traslado a Mondoñedo en el S XIII.

En una colina, se levanta la iglesia románica de San Martiño de Mondoñedo. Es un edificio románico arcaico. Su sencilla fachada está flanqueada de una torra y tiene una entrada con archivoltas. El interior es de tres naves. El ábside, con bandas lombardas, está reforzada por contrafuertes.

VIVEIRO. PUERTO PESQUERO, TRADICIÓN MEDIEVAL Y TURISMO DE PLAYAS

Viveiro tiene tres «almas» muy distintas y separadas. Es un puerto pesquero y astillero de construcción naval; tiene un casco antiguo muy bien conservado; y es un gran centro turístico playero.

VISITANDO EL VIVEIRO ANTIGUO

Visitamos el Viveiro antiguo, muy bien conservado. De nuevo, iglesias románicas con añadidos barrocos, palacios nobiliarios también barrocos y casas burguesas con galerías.

Murallas

La villa conserva de sus murallas la Puerta de Carlos V, renacentista, adornada con medallones y torres. El resto de las antiguas defensas son ahora casas con galerías. Las calles y plazas del centro conservan el sabor medieval y tradicional.

Casco antiguo

Viveiro ha vivido siempre del mar y de la ría. Pesca y comercio marítimo y control del paso de la ría la hicieron rica, ya en la Edad Media. Su trazado conserva el esplendor con que se adornó desde el S XVI.

La villa tuvo momentos de esplendor: la época de los Austrias, cuando se construyeron sus palacios barrocos y el S XIX, cuando edificó sus viviendas de galerías.

Iglesias medievales

Viveiro tiene también dos grandes iglesias medievales: la románica de Santa María, en el centro, y la gótica de San Francisco, en las afueras.

La iglesia de Santa María do Campo, románica del S XII, preside el centro medieval, desde una colina. Tiene una sencilla fachada, adornada de rosetón y portada con archivoltas; su interior es de tres naves con columnas y techumbre de madera.

El convento e iglesia de San Francisco bordean el centro antiguo, en el ensanche medieval, como tantos edificios franciscanos. Es gótica del S XIV. Su sencilla fachada, con tres puertas, da entrada a un interior gótico franciscano de una nave.

VIVEIRO DE PLAYA Y TURISMO

Cruzando el Ponte da Misericordia, sobre la ría, entramos en la Viveiro de playas, turistas y veraneo. Subiendo por una colina, junto al mar, llegamos a nuestro hotel.

Nos instalamos en el hotel, inaugurado por Fraga Iribarne, cuando era ministro, y sin cambios apreciables. Impresionantes vistas sobre la bahía. 

Viveiro ha sabido combinar su casco antiguo, al tiempo que desarrollaba la pesca y la industria pesquera y naval y creaba una gran zona turística, alrededor de sus inmensas playas de arena.

Por unas escaleras y un camino, se baja a la Praia da Costa, «debajo » del hotel.  Aprovechamos el día siguiente para nadar en aguas de la bahía formada alrededor de la playa. Todavía se mantienen gran parte de los chalets, construidos a principios del S XX en el paseo de la playa.

Por la tarde, caminata hasta el viejo Viveiro, que volvemos a visitar. Nos llama la atención la gran cantidad de tiendas tradicionales, que siguen existiendo con mucha vida. Nos recuerda la larga historia comercial de la villa, ya desde la Edad Media.