Historia del Reino Unido

DOS THOMAS, CANCILLERES DE INGLATERRA Y SANTOS (2) THOMAS MORE

Thomas More, o Tomás Moro  (Londres 1478 – Londres 1535), fue un jurista, político, humanista y escritor inglés. Abogado, profesor de Derecho y juez, fue después diputado y ministro del Rey Enrique VIII y Lord Canciller del Reino de Inglaterra. Importante detractor de la Reforma protestante, se negó a jurar fidelidad al Rey como Cabeza de la Iglesia de Inglaterra, frente al Papa de Roma. Fue juzgado por alta traición, condenado a muerte y ejecutado. 

Primeros años

More nació en Londres en 1478, en una familia de juristas y abogados. Recibió una esmerada educación humanista y religiosa en Londres y Oxford. En 1496, ingresó como abogado en Lincoln’s Inn, uno e los colegios de abogados de Londres, donde trabajó muchos años.

A partir de 1497, empieza su relación con los círculos humanistas europeos, siendo gran amigo de Erasmo de Róterdam. Ya entonces, combinaba el humanismo con una intensa vida religiosa. Al tiempo que traducía clásicos latinos o de renacentistas italianos al inglés, se movía en ambientes religiosos próximos a franciscanos o cartujos.  

Vida profesional y familiar 

Casado en 1505 y pronto con hijas, se dedica al mundo jurídico con intensidad: es abogado de éxito en Lincoln’s Inn y profesor de Derecho y juez. 

Hans Holbein El Joven. Thomas More y familia.

Moro no abandona su actividad literaria humanística. Entre 1513 y 1518, escribe su famosa Historia de Ricardo III. En 1516, publica su aún más famosa Utopía.

Además de abogado y profesor, de escritor humanista de éxito, Tomás Moro tuvo una muy intensa actividad política.

Vida pública 

Miembro del Parlamento desde 1504, Tomás Moro fue elegido juez y magistrado municipal  en la ciudad de Londres, ya en la época de Enrique VII. 

Con la llegada de Enrique VIII, protector del humanismo y de las ciencias, Moro siguió siendo diputado y empezó su rápida carrera política. 

En 1517 Tomás Moro entró a trabajar para el Rey, primero en cargos jurídicos de confianza, después como miembro del Consejo Real. Pronto, Enrique VIII le confió complicadas misiones diplomáticas en Europa.

En 1520 ayudó a Enrique VIII a escribir Defensa de los siete sacramentos, libro que valió al Rey el título papal de “Defensor de la Fe”.

En 1521, More fue nombrado knight (caballero) y Canciller del Exequer (Ministro de Hacienda). En 1523, fue elegido “Speaker” (Presidente) de la Cámara de los Comunes. En 1524, fue nombrado Administrador de la Universidad de Oxford y Canciller del Ducado de Lancaster (Ministro Administrador de las posesiones reales). En 1526 es nombrado Juez de la Cámara Estrellada (el Tribunal Supremo). 

Hans Holbein El Joven. Thomas More, Canciller de Lancaster. 1527. Frick Collection (Nueva York)

Finalmente, el Rey le designó Lord Canciller (Primer Ministro) en 1529. Fue el primer Canciller laico, desde hacía varios siglos.

Campaña contra la Reforma

Tomás Moro vio a la Reforma protestante como herejía y una amenaza a la unidad de la Iglesia y la sociedad. Así, activó medidas para impedir la importación de libros luteranos en Inglaterra.

Se le acusó en el S XIX de haber perseguido a los luteranos ingleses. Pero se ha probado que, entre 1519 y 1531, años de su mayor influencia, no se pronunció ni una sentencia de muerte por herejía en Inglaterra.

Condena y muerte

En 1530, empieza el alejamiento de Enrique VIII y Moro. 

El Rey pretendió que el Papa declarase nulo su matrimonio con Catalina de Aragón, que no podía tener hijos, para casarse con Ana Bolena. Tomás no apoyó la pretensión real y no firmó la carta de nobles y prelados que, instigados por Enrique VIII, pidieron al papa la anulación del matrimonio real. 

La negativa del Papa supuso la ruptura de Inglaterra con la Iglesia de Roma y el nombramiento del Rey como Cabeza de la Iglesia de Inglaterra.

En 1532 Moro renunció a su cargo de Canciller. En 1534 se negó a firmar el Acta de Supremacía, que declaraba que el Rey era la Cabeza de la Iglesia de Inglaterra y la separaba de la obediencia a Roma. Moro se negó a aceptar la supremacía real y fue encarcelado, siguiendo instrucciones de Enrique VIII.

También siguiendo instrucciones del Rey y su gobierno, Thomas fue juzgado, acusado de alta traición, y condenado a muerte. Fue ejecutado en la Torre de Londres el 6 de Julio de 1535; está enterrado en Saint Peter, capilla de la Torre.

DOS THOMAS, CANCILLERES DE INGLATERRA Y SANTOS (1) THOMAS À BECKET

Thomas Becket (Londres, 1118 – Canterbury, 1170) fue un noble, clérigo y político y religioso inglés, Arzobispo de Canterbury y Lord Canciller del Reino de Inglaterra. Fue asesinado tras entrar en conflicto con Enrique II por la defensa de los intereses de la Iglesia católica inglesa.

Thomas nació en Londres, en 1118, en una familia burguesa originaria de Normandía. Ingresado en la Abadía de Merton, Sudeste de Inglaterra, estudió Derecho; también estudió teología en París y Bolonia.

CARRERA POLÍTICA Y ECLESIÁSTICA. CANCILLER Y ARZOBISPO

Canciller de Inglaterra

De regreso a Inglaterra, Becket pasó a trabajar en el Arzobispado de Canterbury, y fue encargado de varias misiones en Roma. En 1154 fue nombrado Deán de la Catedral de Canterbury y al año siguiente, Lord Canciller (Primer Ministro) del Reino.

Enrique II de Inglaterra, como otros reyes normandos de Inglaterra, pretendía tener un control absoluto, tanto de su reino como de la Iglesia; quería eliminar los privilegios adquiridos por el clero inglés, que disminuían su autoridad.

Becket le pareció la persona idónea para defender sus intereses. El joven Canciller se convirtió en un fiel servidor de Enrique II; aunque, manteniendo su reserva ante las pretensiones del Rey. 

Al fallecer el arzobispo de Canterbury en 1161, el Rey impuso a Thomas como su sucesor, frente al candidato preferido por el capítulo de los canónigos de la Catedral, que debían elegirle. 

Arzobispo. Controversia con la corona

Desde que fue consagrado, el cortesano Becket se convirtió en un prelado austero y piadoso, dispuesto a enfrentarse al Rey, para sostener los derechos de la Iglesia. El Arzobispo recibió el apoyo papal frente a las injerencias del Rey. 

ENFRENTAMIENTOS CON EL REY. DEFENSA DE LA AUTONOMÍA DE LA IGLESIA

Becket desarrolló un programa, para liberar a la Iglesia de Inglaterra del control real. Su objetivo era abolir cualquier control civil (es decir real) sobre la Iglesia y sus bienes. Pretendía dejar claro el derecho del clero a elegir a los obispos, sin intervención del Rey,  y consolidar los derechos de la Iglesia sobre sus propiedades.

El Rey comprendió que la política del Arzobispo llevaba a la pérdida de poder real y al refuerzo de la Iglesia de Inglaterra, como un poder independiente del Rey y sólo sometido al Papa de Roma.  Así que decidió acabar con los intentos reformistas de Thomas.

Asambleas eclesiásticas. Las constituciones de Clarendon

Becket con el Rey Enrique II. Miniatura del S XIV

Para imponerse, el Rey convocó al clero en 1163, exigiendo la derogación de las excepciones de jurisdicción de la Iglesia. Los obispos, en general, estaban dispuestos a admitir las peticiones del Rey, pero el Arzobispo se negó. 

Finalmente, Enrique y Thomas aceptaron un acuerdo basado en volver al status quo anterior; pero las cuestiones de fondo quedaron sin resolver. 

El Rey insistió: convocó otra asamblea en Clarendon en 1164 en la que volvió a presentar sus peticiones, que implicaban el abandono de la independencia jurisdiccional del clero y de su dependencia de Roma. Obtuvo la aprobación de parte del clero, pero no la del Primado. 

Becket trató de llegar a un acuerdo, pero el Rey se obstinó en sus demandas, por lo que éste se negó a aceptarlas. El enfrentamiento era inevitable. 

Acusaciones contra el Canciller. Exilio en Francia 

Ante la negativa, Enrique trató de deshacerse de Becket por la vía judicial y lo convocó ante el gran consejo en 1164, para responder de la acusación de oposición a la autoridad real y abuso de su cargo de Canciller del Reino.

Martirio de Santo Tomás Becket. Esmalte de Limoges. S XII. Victoria & Albert Museum

Becket alegó que la asamblea no tenía jurisdicción para juzgarlo y recurrió ante el Papa. 

Dándose cuenta del peligro que corría, el Arzobispo se refugió en Francia. Enrique persiguió al Arzobispo fugitivo, dictando una serie de decretos contra Becket y sus amigos y partidarios. 

Protegido por Luis VII de Francia, Becket permaneció dos años en la abadía cisterciense de Pontigny. El Papa Alejandro III también le apoyó, pero no aceptó excomulgar al Rey, como pretendía Thomas. 

Alejandro III simpatizaba con las ideas de Becket, pero prefería contemporizar. Envió legados papales a Inglaterra para arbitrar la cuestión. el Arzobispo aceptó las condiciones acordadas por los legados con el Rey, a cambio de que éste respetase los derechos eclesiásticos.

ENFRENTAMIENTO FINAL, ASESINATO

Sin embargo, Enrique se negó a devolver las propiedades eclesiásticas que había invadido. Thomas reaccionó, preparando sanciones, contra los que habían ocupado bienes de la Iglesia y contra los obispos que lo habían secundado. 

Tomás volvió a Canterbury en 1170, para ejecutar su plan de oposición al Rey. La tensión imposibilitaba una salida satisfactoria. 

En este contexto, cuatro caballeros normandos interpretaron como órdenes dos frases del rey, exasperado: «¿Nadie puede librarme de este cura turbulento?» y «Conviene que Becket desaparezca». Reginald Fitzurse, Hugo de Morville, William de Tracy y Richard Brito asesinaron al Arzobispo, el 29 Diciembre 1170 en el atrio de la Catedral de Canterbury mientras asistía a vísperas con la comunidad monástica. 

Los cuatro caballeros rodearon a Becket y le asestaron varios tajos en la cabeza con sus espadas. Según la leyenda, el Arzobispo no opuso resistencia y dijo: «Muero gustoso por el nombre de Jesús y en defensa de la Iglesia católica»El asesinato de Becket conmocionó a la cristiandad. Fue considerado un mártir y reverenciado en toda Europa. Enrique II tuvo que hacer penitencia públicamente ante la tumba de su enemigo, que se convirtió en lugar de peregrinaje. Fue canonizado por el Papa Alejandro III, tres años después, en 1173.

PRIMEROS CRACKS DE LA ECONOMÍA MODERNA. LA BURBUJA DE LOS MARES DEL SUR. REINO UNIDO DEL S XVIII

THE ECONOMIST nos recuerda que 2021 fue el año de las consecuencias de la explosión de la “Burbuja de los Mares del Sur”: hundimientos empresariales, investigaciones y condenas penales. 

La Burbuja de los Mares del Sur (“South Sea Bubble”) es uno de los primeros, y mayores, cracks económicos de la Historia, junto a la Crisis de los Tulipanes holandesa de 1637. Ocurrió en Gran Bretaña a principios del siglo XVIII, y acabó en el “Crack” de 1720. 

EL MONOPOLIO DEL COMERCIO CON AMÉRICA ESPAÑOLA 

La “Burbuja” especulativa se produjo alrededor de las acciones de la Compañía de los Mares del Sur. La británica South Sea Company, dedicada al comercio internacional había conseguido el monopolio del comercio con las colonias españolas de América.

El Reino de España cedió al Reino Unido su monopolio sobre el comercio entre América y Europa, (el “asiento comercial”) en el Tratado de Utrecht de 1713, que puso fin a la Guerra de Sucesión española. La Compañía de los Mares del Sur obtuvo el arrendamiento del monopolio, a cambio de asumir la deuda británica sobre los costes de la participación del Reino Unido en la guerra.  

El comercio directo con las colonias españolas estaba muy restringido por el Gobierno español. Así que muchos inversores ingleses vieron un gran negocio en el “asiento” de la Compañía. Las historias sobre las riquezas de Sudamérica, que serían enviadas a Europa hicieron que muchos ahorradores británicos, se sumaran al frenesí especulador e invirtieran. 

En 1720, cuando las condiciones del Tratado de Utrecht se hicieron públicas y se vio que las promesas de negocio no eran reales, la “Burbuja” especulativa explotó. 

UN NEGOCIO ESPECULATIVO, SIN BASE DE NEGOCIO REAL

Godfrey Kneller. Retrato de Sir Robert Harley, Conde de Oxford. Primer Lord de la Tesorería y Lord Canciller.
Creador de la South Sea Company

La Compañía de los Mares del Sur fue fundada en 1711 por Robert Harley, Lord Tesorero (Primer Minstro) y líder de los “Tories” (conservadores). Su objeto era gestionar y colocar la deuda británica, enorme entonces por la Guerra de Sucesión española. A cambio, la Compañía recibió el monopolio del comercio con América, cedido por España en la Paz de Utrecht en 1713. 

La Compañía tenía “relaciones especiales” con los políticos “Tories”, en el poder apoyados por el Rey. 

Al hacerse públicas las condiciones de la Paz de Utrech, se descubrió que el monopolio concedido por España no era tan importante. Pero la Compañía siguió atrayendo inversores, por la estabilidad de los bonos británicos.​

A partir de 1717, el Tesoro británico tuvo dificultades para pagar los intereses de los bonos: el monopolio del comercio con América no era buen negocio. La Compañía de los Mares del Sur, dominada por los políticos “tories” en el poder, adquirió parte de la deuda del Estado, financiando la compra con una ampliación de capital.

FRENESÍ ESPECULATIVO Y HUNDIMIENTO

Para mantener el interés de los inversores por la deuda británica y por la Compañía, ésta divulgó rumores falsos, sobre el extraordinario valor de su comercio con América: millones en oro y plata, serían transportados a Europa. Además, la Compañía recibió préstamos aprobados por el Parlamento. Todo ello hizo crecer la “Burbuja” aún más. Por otro lado, la Compañía colocó gran parte de sus acciones entre políticos ingleses, con la opción de revenderlas a la Compañía.

Todo ello provocó un frenesí especulativo. El valor de la acción de la Compañía se disparó: de 128 Libras en Enero de 1720, a 890 Libras en Junio.

A partir de ese momento, los inversores más avispados empezaron a vender.

William Hogarth. «El Timo de los Mares del Sur» (1721). Arriba, una cabra, con un letrero «A quién me llevo». Abajo a la izquierda, un protestante, un católico, y un judío apuestan. En el centro, un tiovivo, al que se sube gente. Personas bien vestidas hacen cola para subirse: la tontería de la población, comprando acciones de la Compañía de los Mares del Sur, que no valían nada. Por todo el cuadro,, aparece gente distribuida desordenadamente.

En Agosto de 1720, la tendencia cambió bruscamente. Muchos accionistas decidieron aprovechar el alto valor de las acciones, para venderlas. Esto produjo una espiral descendente en su precio, que se hundió.

La cotización se había hundido a 100 Libras por acción antes de fin de 1720. La crisis se propagó a los bancos británicos: se habían endeudado fuertemente para adquirir y especular con acciones. El crack produjo la quiebra de numerosas empresas y particulares.

El Parlamento, activamente implicado, se disolvió en Diciembre de 1720. El Gobierno Troy (conservador) cayó, muchos de sus miembros y directivos de la Compañía fueron juzgados y condenados a prisión. 

RESULTADO POLÍTICO. DOMINIO DE LOS LIBERALES “WHIGS”. 

GOBIERNO DE GABINETE Y CONTROL DEL PARLAMENTO 

Sir Robert Walpole. Conde de Orford. Primer Ministro de 1721 a 1741. Su popularidad, al «solucionar» el South Sea Bubble, le permitió ser jefe del gobierno 40 años. Retrato de Van Loo (1742) National Portrait Gallery. Londres

El resultado político de la “Burbuja” fue el hundimiento Tory y la subida al poder de los “Whigs” (liberales), liderados por Sir Robert Walpole, que fue Primer Ministro y dirigió el Gobierno durante 40 años.

Walpole solucionó la crisis económica: desposeyó a los beneficiarios de la “Burbuja” de sus riquezas, repartió ese dinero entre las víctimas. Walpole no es famoso sólo por esto. Creó la forma de Gobierno británica moderna: apartamiento del Rey del día a día político, concentración del poder en el Primer Ministro y el Gabinete, dependencia de los parlamentarios de sus electores …